La revolución de la prenda interior reductora

Basta pensar en la heroína de principios de los años 2000, la Bridget Jones interpretada por Renée Zellweger que lucha por ponerse (no sin dificultad más bien cómica) un vestido lencero reductor antes de su fatídica cita con Hugh Grant.
En ese entonces, una prenda de este tipo se consideraba un aliado leal pero que se debía mantener bien oculto.
Hoy en día ya no es así.

Una tendencia que debe mucho a las influencers y estrellas que han desestigmatizado el uso, incluso a diario, de la prenda interior reductora poniéndola a la moda, tanto en las redes sociales tales como Instagram como en la vida cotidiana.
Entre todas ellas, quizás el mayor mérito le cabe a Kim Kardashian, quien probablemente es la influencer más famosa e importante de estos años, que precisamente el año pasado lanzó Skims.
Esta es su línea personal de shapewear que no sólo permite moldear la silueta de la mejor manera, la estrella es famosa por su forma de reloj de arena fuertemente acentuada por su elección de ropa interior y vestidos, sino que también se adapta a los diferentes colores de piel y hace que dicha prenda sea aún más inclusiva.

Minimalista, sin encajes y sin adornos inútiles y, a menudo, sin costuras, la prenda interior reductora está demostrando ser una prenda para tener contigo, especialmente en la temporada de verano cuando queremos sentirnos siempre cómodas incluso mientras usamos ropa que deja nuestro cuerpo más descubierto.

La verdadera revolución de la nueva oleada de líneas de shapewear es haber introducido nuevamente el concepto de comodidad que se había perdido en los últimos años, debido a que las marcas de lencería habían contribuido a crear una imagen de la mujer perfecta y, a menudo, totalmente alejada de nuestra vida cotidiana y de la realidad. Y esta imagen contribuyó a alimentar esa sensación de insuficiencia y de falta de amor y aceptación hacia nuestro cuerpo.

En este sentido, la prenda interior reductora actual quiere ayudarnos a valorizar nuestros puntos fuertes, trabajando en una silueta más suave y definida a la vez, y que se presta bien sobre todo cuando queramos usar un vestido más ajustado que envuelva nuestras formas.
Es precisamente para este tipo de vestidos que nace el mito del shapewear y que, como se ha dicho, nos ayuda a sentirnos más cómodas incluso con vestidos estrechos o caracterizados por escotes y aberturas particulares.

Desde los tonos desnudos o neutros, como el blanco o el negro, la prenda interior reductora representa hoy en día de la mejor manera esa tendencia minimalista que se ha impuesto en la industria de la lencería, más atenta a las necesidades cotidianas de la mujer y que hoy, gracias a los meses de cuarentena, busca una mayor comodidad incluso en la elección de la ropa interior a utilizar.

Se introduce en este segmento también la línea underwear de BeGood, capaz de combinar la necesidad de las mujeres de tener una prenda interior reductora, sencilla y cómoda, con su tecnología e innovación en el campo de los cosméticos y los textiles.

Hay varias prendas disponibles y se adaptan bien a las necesidades más diversas.

Para la parte superior del cuerpo, se encuentra disponible un body adelgazante y reductor en negro o azul, con tirantes desmontables, perfecto para el uso diario como ropa interior o como una prenda casual combinada con un par de jeans o una falda.

Como todas las prendas Begood, también esta se encuentra fabricada con la Dermofibra^® Cosmetics hidratante, drenante y tonificante, con un efecto adelgazante inmediato que redefine las curvas.
En particular, la acción combinada de la tela reductora y del bioinfrarrojo crea una prenda inteligente que estimula la microcirculación eliminando el exceso de fluidos.
La tela anti-UV es transpirable y las propiedades que contiene, como el Aloe Vera y las Vitaminas A y E, ayudan a hidratar y revitalizar la piel mientras se lleva puesto, en tanto que la cafeína trabaja para obtener un efecto reafirmante, ayudando a reducir las imperfecciones de la piel.

Mientras que para la parte inferior del cuerpo, BeGood ha realizado tres prendas diferentes. La culotte estilizante y reductora y la faja estilizante y reductora son perfectas para llevarlas puestas de forma más general cuando queremos sentirnos cómodas incluso con un vestido o, más en general, con una prenda particularmente ajustada, y en todas aquellas situaciones en las que queremos dar más definición a nuestra silueta.
Ambas están hechas de Dermofibra^® Bio-Infrared y están disponibles en negro y en color rosado.

En particular, la Dermofibra^® Bio-Infrared se caracteriza por la FIR Technology. Esta última combina la acción de la compresión con la biotecnología, que juntas crean una tela inteligente que ayuda a redefinir las curvas a la vez que estimula la microcirculación y elimina el exceso de fluidos con un efecto permanente.

Por último, también se encuentra disponible la tanga reductora de Dermofibra^® Cosmetics que, por lo tanto, garantiza una acción dirigida a hidratar, drenar y tonificar el vientre. Perfecta para aquellas mujeres que, aunque quieran una prenda shapewear, no quieren renunciar a la comodidad que ofrece el modelo de la tanga.