Consejos para mejorar la circulación de las piernas

Aunque es posible padecer molestias circulatorias a distintas edades, por lo general son más frecuentes a partir de los 40 años.
Los principales hábitos que provocan problemas de circulación son la vida sedentaria (la falta de ejercicio físico) y una mala alimentación.

La actividad física es un factor clave cuando se trata de cuidar la circulación de las piernas y del resto del cuerpo.
Por este motivo, se recomienda dedicar al menos 30 minutos al día a hacer ejercicio.

Afortunadamente, hay ejercicios para todos los gustos y para todo tipo de necesidades. Hoy recomendamos varias formas sencillísimas de ejercitar las piernas de manera sana.


Pedaleo o bicicleta en el aire
Una de las mejores actividades para favorecer una buena circulación de la sangre en las piernas es emular el pedaleo.
Este movimiento implica elevar y desplazar las piernas al mismo tiempo, lo cual favorece el retorno de la sangre al corazón.
Para realizarlo, basta tumbarse boca arriba en el suelo o en una esterilla, con las manos en la nuca y la espalda bien apoyada.
Desde esta posición, solo hay que levantar las piernas y simular el movimiento del pedaleo según la capacidad de cada una, pero siempre haciendo series de al menos un minuto de pedaleo, seguidas de 30 segundos de reposo.

Elevar y flexionar
Los ejercicios de elevación y flexión favorecen la circulación de las piernas, pues estimulan el flujo.
Son ideales para prevenir y combatir molestias circulatorias como las varices.
Túmbate en el suelo boca arriba y levanta las piernas hacia el techo, tratando de estirarlas lo más posible. A continuación, dobla las rodillas y estira de nuevo las piernas. Realiza 20 repeticiones, alternando los movimientos.
Con este ejercicio, además de mejorar la circulación, también fortalecerás las rodillas.


Separar las piernas

Este sencillo movimiento facilita el retorno de la sangre de las piernas al resto del cuerpo y evita la formación de varices.
Consiste en separar y juntar las piernas repetidas veces, intentando mantener el equilibrio de forma que no toquen el suelo.
Con este ejercicio, además de los resultados ya mencionados, también trabajarás el core. Haz dos o tres series de 15 repeticiones cada una.

Flexión de los pies

Todos los tipos de flexiones son siempre ejercicios excelentes para mejorar la circulación y fortalecer los músculos. En este caso, hablamos de un tipo de flexión bastante sencillo, en la que el movimiento se realiza solo con los pies.
Siéntate en una silla con los talones bien apoyados al suelo. Desde esta posición, levanta la punta de los pies y mantén la posición durante unos segundos; después, baja las puntas y levanta los talones de forma alterna.
Realiza 20 repeticiones con cada pie.

Un par de consejos sobre la alimentación
En general, el ejercicio diario te ayudará a cuidar la circulación de las piernas y a mejorar la salud.
Pero para que los efectos sean óptimos, es imprescindible complementar la actividad física con el consumo de alimentos sanos que ayuden a estimular la circulación, como arándanos, jengibre, pescado azul, nueces, ajo, melocotones y verduras de hoja verde.
¡Ah, y no te olvides de evitar la sal!

¿Cómo hay que vestirse cuando se tienen problemas de circulación?
Las mujeres con predisposición a la insuficiencia venosa deberían llevar habitualmente medias elásticas de compresión gradual o leggings compresivos come los BEGOOD.

Estos últimos están hechos con un nuevo hilo exclusivo, la Dermofibra Cosmetics, que lleva dentro minerales activos y microcápsulas de última generación de aloe vera, vitaminas E y A y cafeína, muy eficaces para reducir la hinchazón y la sensación de pesadez en las piernas.
Además, evitan que empeoren las condiciones de la piel y se forme la celulitis, porque drenan el exceso de líquidos.

En definitiva, se pueden considerar la panacea para la belleza de las piernas.